DÍA
DEL CARABINERO.
Desde la llegada de los Conquistadores Españoles a nuestro país han sido numerosos los intentos para mantener
el orden público y la seguridad. En 1541 comenzó un lento proceso que dio forma
a la institución que hoy lleva por nombre Carabineros de Chile.
LOS PIONEROS EN SEGURIDAD Y
ORDEN.
Pocos meses después de la fundación de Santiago (12 de Febrero
de 1541), Pedro de Valdivia asignó diferentes cargos para conformar la administración del nuevo territorio.
Uno de ellos fue el Alguacil Mayor, que realizaba la función
policial de la época, que consistía en cumplir las órdenes de los jueces y detener a los delincuentes que fueran sorprendidos
al momento de cometer un delito. Apoyados por los Alguaciles menores y los Alcaldes de la hermandad (que protegían los campos), en un comienzo restringieron
su tarea policial solo a la población española, ampliando con posterioridad su labor a mestizos y nativos.
En 1758, bajo el mandato del gobernador Manuel Amat, se añadió
un nuevo cuerpo policial que vino a completar la función ejercida por los alguaciles. Estos eran los Dragones de la Reina, grupo formado por 50 hombres cuya principal tarea era vigilar la ciudad de Santiago de día
y de noche.
Con posterioridad, en 1780, se creó en Santiago un pequeño
grupo de celadores o vigilantes nocturnos, que popularmente fueron conocidos como Serenos.
Además de hacer constantes rondas para vigilar la ciudad, anunciaban cada
cierto tiempo la hora y el estado del tiempo.
La función educativa de Carabineros de Chile es una de las
más importantes que desempeña. Campañas contra la violencia intrafamiliar y las drogas, así como mensajes para promover la
seguridad ciudadana e incentivar el cumplimiento de las normas del tránsito, son solo algunos ejemplos de las actividades
que realizan.
Las Exigencias de un Chile Independiente.
Con el correr de los años, la policía se volvió ineficiente y nuestro país, ya independiente y convertido
en una República, requirió un nuevo orden.
En medio de este escenario, el ministro Diego Portales otorgó el impulso preciso para la evolución definitiva
de la policía chilena. El 30 de junio de 1830 creo en Santiago el Cuerpo de Vigilantes de Policía, formado por 90 hombres que debían proteger la seguridad de los habitantes.
Sin embargo, la vigilancia nocturna siguió en manos de los serenos hasta 1850, cuando el cuerpo policial creado por Portales se unió a ellos,
formando una nueva institución llamada Brigada de Policía, que funcionaba las
24 horas. Poco a poco, este nuevo organismo fue extendiéndose por todo el país.
En 1881 se formó la Policía
Rural, que combatía los delitos de los bandidos en los campos. Este organismo tuvo una corta vida, debido a la falta de
recursos para sustentarlo.
Con la promulgación de la Ley de comuna Autónoma en el año 1891, se consagró la independencia de la Policía del Poder Ejecutivo. Si bien desde su formación los cuerpos policiales dependieron en forma directa del Gobierno,
con esta ley quedaron bajo la tuición de los alcaldes, lo que les dio cierta
autonomía.
Pero el fracaso de este sistema llevó a que en 1896 se dictara una nueva ley, que dispuso que las policías de las ciudades capitales quedaran bajo la dirección
del Presidente de la República y que fueran financiadas con recursos del Estado, pasando a ser fiscales (Policía Fiscal). El resto de las policías siguió siendo municipal.
Múltiples Tareas.
En la actualidad, Carabineros de Chile no solo se preocupa de ser garante del orden público, sino que
desempeña diversas funciones, abarcando desde la protección de nuestra soberanía hasta
el cuidado de menores en riesgo social.
El resguardo de las fronteras, el rescate de damnificados en zonas de catástrofes naturales y el transporte
de heridos en aviones ambulancia son solo algunas de las tareas que Carabineros desempeña en ayuda de la comunidad.
Además, por medio de las Brigadas Escolares de Tránsito y la Escuela Abierta de Educación de Tránsito
cumplen un rol educativo y preventivo al incentivar el respeto a las reglas básicas de tránsito.